En total, se llenó una batea completa de basura, con los residuos que los voluntarios retiraron de dos micro basurales de escombros, además de dos colchones que estaban sobre el estero Reñaca.
De esta forma, la jornada de limpieza fue una contribución muy importante en la conservación de este espacio natural, que es visitado en forma regular por muchas personas para la práctica de deportes y la recreación.